Por Clarke, Modet & Co Chile
Con motivo de la celebración promulgada por la Organización Mundial de Propiedad Intelectual es que enviamos un regalo corporativo a nuestros principales clientes y medios de comunicación con el fin de destacar la importancia de la Propiedad Intelectual.
Este año, la OMPI decidió conmemorar a la música y a toda la industria que impulsa su desarrollo. Es por esa razón, que Clarke, Modet & Co Chile decidió regalar un kit de Propiedad Intelectual, que incluía: tres posavasos de disco de vinilo, uno verde, otro rojo y otro blanco; una carta escrita y firmada por la directora de Clarke, Modet & Co Chile, Carolina del Río (leer carta); y un tarjetón informativo, «la piratería no es un juego de niños» de TIPS con las principales cifras de piratería. En esta nota compartimos los tips del tarjetón.
#WorldIPDay
@clarkemodet_cl
TARJETÓN: «LA PIRATERÍA NO ES UN JUEGO DE NIÑOS»
Las obras musicales provienen de la inspiración y creación de cantantes y compositores, músicos y un sinfín de personas, que han optado por crear en vez de copiar.
El comercio de discos piratas se valoró en 2005 en 3.600 millones de euros (4.500 millones de dólares). En el mismo período, casi 20.0900 millones de canciones se descargaron e intercambiaron ilegalmente en Internet. (IFPI Chile, Asociación de Productores Fonográficos de Chile).
La piratería genera graves daños a la economía de Chile como pérdida de trabajo, ingresos fiscales, inversión extranjera y desincentivo a la investigación y desarrollo de nuevos productos y tecnologías.
La piratería fomenta la delincuencia organizada y atenta contras los derechos de las personas.
Anualmente Chile pierde más de 400 millones de dólares por concepto de piratería. El 62% de software que circulan en Chile son ilegales (OCDE, 2012).
En 2012 la piratería generó un mercado paralelo sobre los mil millones de dólares y evasiones tributarias de 160 millones de dólares, por concepto de productos falsificados (Comisión Nacional de Piratería).
Durante los últimos 8 años Chile se ha mantenido en la “lista roja” por incumplimiento por parte del capítulo de Propiedad Intelectual e industrial que supone una mayor protección del TLC suscrito en Estados Unidos.