El pasado 7 de diciembre, la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) publicó su informe anual sobre la evolución de los indicadores mundiales de propiedad intelectual, World Intellectual Property Indicators Report. En él, nos muestra algunos resultados singulares e interesantes que ya incorporan los datos de cierre de 2019.
De entre ellos, destacamos:
La caída en patentes ha obedecido a la disminución de las solicitudes presentadas por los residentes chinos. Así, la Oficina de patentes de este país ha recibido un -9,2% menos de solicitudes durante 2019, fundamentalmente por, como decíamos, la caída de presentaciones de sus residentes (-10.8%), lo que se achaca a un cambio general en la normativa de ese país, que tiene por objeto optimizar la estructura de las solicitudes y mejorar su calidad.
Sin embargo, en general, vemos que en China se ralentizó durante 2019 el crecimiento de solicitudes en todas las modalidades de PII:
El efecto China es especialmente importante para los datos mundiales, ya que las solicitudes que se realizan en este país de las distintas modalidades de Propiedad Industrial suponen más del 55% de los registros a nivel mundial.
Por ello, para tener una radiografía completa de la evolución de estos indicadores en 2019 en todo el mundo, será necesario hacer un análisis más detallado de los datos que recoge este informe, por ejemplo, eliminando el “efecto distorsionador de China”.
Ofrecemos, sin embargo, un adelanto: sin analizamos el comportamiento de estos indicadores en resto de países, la evolución mundial de las patentes presenta el mejor registro de los últimos 5 años.
En cuento a la evaluación de la actividad de las oficinas de Propiedad Industrial de los principales países de habla hispano y portuguesa, cabe destacar su buena evolución, escalando 12 posiciones en el ranking mundial.